Desmontando al gobierno

Una de las famosas frases que se atribuyen a Churchill es “El éxito consiste en poder ir de fracaso en fracaso sin perder entusiasmo”. Y así veo al presidente Sánchez. Piensa claramente que es un éxito su gestión, a pesar de ir de fracaso en fracaso. Pero debo reconocerle su tesón y su entusiasmo en intentar convencernos de que es así.

Pero al final los resultados ponen a cada uno en su sitio. Y por mucho entusiasmo, y por mucho que inviertas en comunicación para convencernos, cuando no vemos resultados, empezamos a dudar de esa gestión. Y más aún, en una persona tan poco creíble como el Sr. Sánchez. Todos tenemos infinidad de muestras de sus engaños y de sus mentiras.

Cuando los índices de pobreza y de ciudadanos en riesgo de vulnerabilidad afloran, el “no dejaremos a nadie atrás” suena más a epitafio que a eslogan comercial, como así pretendían.

Cuando somos el último y único país de la Unión Europa que no ha recuperado el PIB previo a la pandemia, lo del crecimiento robusto de la ministra Calviño, suena a chiste.

Cuando somos el país que más deuda ha generado desde el inicio de la pandemia, nos damos cuenta, que no se preocupan para nada de este país, si no exclusivamente de contentar a quienes les apoyan y toman medidas, solo para intentar mantenerse en el poder.

Este es el gobierno de Sánchez: inconsistencia, carencias y falta de credibilidad. Exactamente, las palabras utilizadas por la presidenta de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal sobre los Presupuestos Generales del Estado para 2023. Por cierto, el último fracaso que nos está intentando “vender” como éxito el Sr. Sánchez.

Te puede interesar

Porque estos presupuestos, son una clara demostración de lo que es este gobierno.

La semana pasada hemos vivido en el Congreso de los Diputados las comparecencias de altos cargos de la administración, el gobernador del Banco de España y la presidenta de AIReF.

Los dos últimos, representantes de las únicas instituciones independientes que nos visitaron, nos hicieron dos enmiendas a la totalidad. No son correctos, ni la previsión inicialmente en la que se basan todos los presupuestos-el crecimiento del PIB-, ni los ingresos, ni los gastos, ni la inflación. Es decir, ninguna de las previsiones importantes fue apoyada por estas dos instituciones.

La opinión del Banco de España es muy importante por su capacidad de análisis, con un equipo muy especializado en previsiones macroeconómicas. Y en el caso de la AIReF, porque es la entidad asignada por la ley para analizar y hacer seguimiento de los procedimientos presupuestarios, la institución que más en profundidad los conoce, con un equipo muy profesional dedicado en exclusiva a eso.

Es decir, sus opiniones son suficientemente importantes como para todos las valoremos y actuemos de forma adecuada. Por eso hemos pedido la retirada de los presupuestos y hemos pedido que el gobierno traiga otros nuevos, y válidos.

Pero el gobierno, en vez de hacerles caso, lo que ha hecho es criticarles, simplemente porque atacan sus intereses. Al Sr. Sánchez, su gobierno, y al sanchismo, no les gusta nada, que nadie les lleve la contraria, que destaque sus mentiras o medias verdades, o que aflores la mala calidad de su trabajo, como ha ocurrido estos días.

Cada vez son menos democráticos, quieren acallar a todas las instituciones que opinan diferente a ellos y les impiden seguir con su plan marcado. Esto también lo estamos observando durante su gobierno. Por eso debemos seriamente esforzarnos para intentar que no vuelvan a gobernar, no solo por la economía española, también por nuestra democracia.