La histórica decisión significa que Washington no podrá devolver inmediatamente a los migrantes sin darles la oportunidad de pedir asilo. Sin embargo, el gobierno puede recurrir la decisión.
Un juez federal ordenó el jueves (16.09.2021) al gobierno de EE.UU. que suspenda el retorno inmediato de las familias migrantes, que están retenidas en la frontera para luchar contra el COVID-19.
US District Judge Emmet Sullivan ruled that US officials can no longer cite the CDC's Title 42 health order to deport families after the rule allowed for the deportation of nearly 1 million people…. https://t.co/zPoCsECaEy
— SkyNet Platforms (@SkyNetPlatform) September 16, 2021
El juez Emmet Sullivan, que dio a las autoridades un plazo de 14 días para cumplir su sentencia, dijo que había suficientes medidas alternativas para limitar la propagación del virus.
«Dada la amplia disponibilidad de pruebas, vacunas y otras medidas sanitarias, el Tribunal no está persuadido de que la transmisión del COVID-19 durante los procedimientos fronterizos no pueda contenerse de forma significativa», escribió en la extensa sentencia de 50 páginas.
Al inicio de la pandemia, la administración del republicano Donald Trump invocó una normativa sanitaria para ordenar la deportación de todos los inmigrantes que entraran ilegalmente en EEUU.
Desde que se hizo cargo de la Casa Blanca, el demócrata Joe Biden ha puesto fin a esta práctica para los menores no acompañados, pero sigue rechazando a las familias y a los adultos, lo que le ha valido las críticas de los grupos de defensa de los inmigrantes, que el jueves celebraron la sentencia del juez Sullivan.
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“President Biden should have ended this cruel and lawless policy long ago, and the court was correct to reject it today,” said Omar Jadwat, director of the ACLU’s Immigrants’ Rights Project. https://t.co/EasBnE3Z7g
— WFSB Channel 3 (@WFSBnews) September 16, 2021
«El presidente Biden ha esperado mucho tiempo para poner fin a esta política cruel e ilegal, y el tribunal tiene razón al rechazarla hoy», dijo Omar Jadwat, del influyente grupo de derechos civiles ACLU.
Sin embargo, es probable que el gobierno, que se enfrenta a flujos migratorios sin precedentes a través de la frontera mexicana, recurra la decisión.
Más de 200.000 personas fueron detenidas en la frontera sur en agosto, de las cuales 86.000 viajaban con sus familias, según las últimas cifras oficiales. Es la cifra más alta en 20 años.
Los republicanos llevan meses acusando al presidente Biden de provocar una «crisis migratoria» al suavizar las medidas de su predecesor.
gs (afp, ap, reuters,dw)