El terrorismo, la corrupción y el narcotráfico sin duda entran entre las piezas claves que permiten que Maduro y toda su cúpula sigan en Venezuela. Pero, la ficha fundamental de todas estas relaciones las lleva con batuta Tareck El Aissami, quien es el representante venezolano ligado a fomentar y mantener las relaciones del Estado con el terrorismo islámico.
Si algo tiene el régimen de Maduro es la capacidad de aliarse con quien le brinde su mejor tajada y por supuesto que los regímenes islámicos les brindan la posibilidad de seguir haciendo sus maniobras a cambio de instaurar bases militares cerca o dentro de Venezuela.
Hace algunos días, el Obispo Mario del Valle Moronta Rodríguez habló de la presencia iraní en Venezuela y en Factores de Poder, específicamente en Fuera de Orden, analizamos todo este tema en compañía de Daniel Lara y Nixon Moreno.
Al nombrar a la joya de Tareck El Aissami tres cosas indispensables salen a relucir: Narcotráfico, corrupción y poder. Se trata de un personaje capaz de corromper, comprar y de manipular, además de colocar a su antojo fichas dentro de la oposición y dentro del Estado.
Su historia y su relación con los terroristas no son nuevas, ya que luego de sus intentos por obtener representación estudiantil, se refugió en diversos sitios donde se formó como agente de terrorismo.
Nixon Moreno, quien compitió con él en su época de dirigencia estudiantil y quien conoce desde la infancia a la ficha del régimen de Maduro, nos contó sus inicios y sus primeras maniobras negociadas con el objetivo de poder.
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“Tareck El Aissami representa al fundamentalismo político desde su vida estudiantil… cuando lo derroté en la Federación de Centros Universitarios lo primero que me descubrí es que este señor utilizaba la excusa de las víctimas y niños palestinos para organizar cenas y blindarse de un aparato económico”, comentó Moreno.
Seguidamente, contó que El Aissami recibió formación de Siria que lo involucró y lo convirtió en un agente directo de terrorismo. En otras palabras, se inyectó una ideología terrorista y por eso es unos de los representantes claves dentro del régimen de Maduro y de las relaciones con terroristas y países islámicos.
A todo esto se le suma las mafias de entregas de pasaportes cuando era director de esta área, en donde les entregó un sinfín de documentos falsos a conocidos delincuentes internacionales, incluso a miembros del ELN, entre otros representantes extranjeros.
Ahora bien, si hablamos de la actualidad y teniendo el cargo de mando dentro de PDVSA, la cosa no es diferente. El Aissami es quien maneja los negocios y la compra de gasolina a países como Irán, diseñando grandes negocios que terminan por sustentar económicamente al régimen de Maduro con trasfondos turbios e irregulares.
Venezuela y el terrorismo
De acuerdo con Moreno, El Aissami está ligado en todos los asuntos que involucran al régimen y a los estados islámicos. Incluso, afirmó que “la mayor presencia de Irán en el mundo, después de Siria y Yemen, está en Venezuela”, situación que representa una alta vulnerabilidad para la nación suramericana.
En el mismo sentido, países como EEUU saben perfectamente el peligro de la presencia iraní en el continente, mientras que el régimen de Maduro y su cabecilla de confianza en el tema, El Aissami, ven todas estas relaciones y “el narcotráfico como armas contra occidente y EEUU”.
La realidad es que este tema tiene de sobra por tratar, pero lo cierto es que no es solo una fantasía la instauración y construcción de bases militares iraníes cerca de las fronteras de Venezuela, pues la nación es usada como clave dentro de las fichas del terrorismo.
Artículo basado en el programa Fuera de Orden, conducido por Daniel Lara, de este 19 de noviembre de 2020.
