Dos embarcaciones provenientes de Guyana fueron detenidas el pasado 23 de enero por el buque ‘Comandante Hugo Chávez GC 24’ en costas venezolanas. A través de un comunicado, las autoridades del país usurpador catalogaron la acción como “una flagrante violación de su soberanía y de las normas fundamentales del derecho internacional”.
Guyana afirmó que la embarcación militar venezolana trasladó a los pesqueros hacia la costa de Güiria, situada en el estado Sucre, donde procedieron a la inmovilización de los buques y a la detención de toda su tripulación. Según el comunicado, todavía no ha recibido ninguna explicación por parte del régimen de Maduro.
El país usurpador solicitó a la comunidad internacional que actúe y reitera que esto es “un acto de injerencia por parte de las Fuerzas Armadas venezolanas”.
En respuesta a esto, la Cancillería chavista objetó, mediante un comunicado, las falsas acusaciones tras interceptación de barcos guyaneses en costas venezolanas. «En el mencionado comunicado, la República Cooperativa de Guyana incurre en una flagrante intromisión en asuntos internos, al incorporar además una serie de absurdas y erráticas objeciones a la promulgación reciente de un decreto de ordenación territorial venezolano que exclusivamente postula la formulación de políticas públicas para el desarrollo marítimo en territorio exclusivo y no controvertido de la República Bolivariana de Venezuela», señaló el comunicado.
Este martes, el canciller chavista Jorge Arreaza sostuvo una videoconferencia con su homólogo de Guyana, Hugh Todd, en relación a este tema.
Jorge Arreaza también entregó una nota de protesta al Encargado de Negocios de la República Cooperativa de Guyana, Robert McKenzie, en rechazo a las difamaciones y acusaciones del país usurpador tras la incursión no autorizada de dos embarcaciones en aguas venezolanas.