Una nueva traba se presentó en el caso del testaferro del régimen venezolano, Álex Saab. En esta oportunidad, la Corte Suprema de Cabo Verde, país donde se encuentra detenido el ciudadano, se declaró incompetente para decidir sobre la solicitud de extradición de Saab hacia los EEUU.
De esta manera y con esta decisión, la institución devuelve el caso a la Corte de Apelaciones del país africano por considerarse sin capacidad para concluir sobre el arresto del empresario colombiano.
Aunque muchos aseguraban equivocadamente que el caso Saab tendría un rápido proceso judicial y una pronta extradición a la nación norteamericana, ya van más de cuatro meses desde su detención, el pasado 12 de junio. Así pues, una suma de trabas ha hecho que el acusado de testaferro se mantenga fuera de EEUU sin su proceso penal respectivo.
Por su parte, la defensa del acusado expresó que “esta resolución expone que dicho tribunal no tiene competencia para decidir en lo relacionado al arresto domiciliario, y toma, por lo tanto, la posición de devolver el caso a la Corte de Apelaciones del país, para que sea ésta la que estudie de nuevo las medidas provisionales solicitadas por el equipo legal del afectado”.
Este caso ha tenido mil y un trabas, así como excusas para mantener a Álex Saab en la isla y extender su proceso de extradición. Por ello, el trámite judicial, que se pensaba que podría durar 15 días, se extendió más de lo esperado y las autoridades no descartan que el acusado pase navidades aún en la nación africana.
No es difícil imaginar que detrás de estas presuntas trabas judiciales están la chequera e influencia del chavisno. El duro lobby del régimen muestra su capacidad de dilatar esta decisión, cuidado si no de revertirla.
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Según reseñó El Tiempo de Colombia, funcionarios de la DEA y otros representantes estadounidenses se trasladaron a Cabo Verde “para monitorear el proceso de extradición”. Sin embargo, la defensa de Álex Saab se enfoca en denunciar supuestas “violaciones de derechos del acusado” y apelar a cualquier recurso que permita que la extradición se posponga el mayor tiempo posible.
En primer lugar, cuestionan y rechazan su detención por “violar la inmunidad” que según tenía Saab por ser un “agente especial del gobierno (régimen) venezolano”. En segundo orden, han denunciado en reiteradas ocasiones presuntas “torturas” que estaría recibiendo el señalado como testaferro en la prisión de Cabo Verde.
Incluso, se llegó a hablar de un supuesto plan de fuga, el cual generó alerta y movilizó a funcionarios para duplicar la seguridad en el centro de detención.

¿De qué acusan directamente a Álex Saab?
EEUU acusa a Saab de ser un prominente testaferro de Nicolás Maduro. Igualmente, aseguran que el empresario colombiano está involucrado en actos de corrupción ligados con “contratos opacos en la construcción de casas subsidiadas para el régimen de Chávez y de Maduro, en cuantía de 350 millones de dólares”.
Más allá, también lo involucran con la posesión de unos 700 millones de dólares que tendría el ciudadano producto de “actividades irregulares”.
Finalmente, y para seguir sumando ceros en el caso de Álex Saab, la Fiscalía de Colombia incautó 6 propiedades del colombiano el pasado 17 de octubre valoradas en 38.000 millones de pesos.
Entre estas últimas y según El Tiempo, se encuentran “dos inmuebles, tres sociedades denominadas Promotora Dubera SAS, HSC Capital SAS, y Golden Sun Trading Colombia SAS y una motocicleta Harley Davidson”.
Seguidamente, el mismo medio agregó que “la investigación del ente acusador señala que estas sociedades al parecer eran utilizadas por Saab para lavar activos, pues habrían sido constituidas como empresas de papel o empresas fachada, a través de personas cercanas a Saab”. Esto, ya que la Fiscalía aseguró que dichas empresas «no tenían capacidad financiera ni patrimonial e incrementaron sus activos de manera desproporcionada».
Pese a estos señalamientos y la incautación de diversas propiedades, el también involucrado en corrupción con las cajas CLAP venezolanas se mantiene en Cabo Verde. Mientras esto ocurre, aunque EEUU presiona para llevárselo a la nación, su defensa hace todo lo posible para extender el procedimiento legal en la isla africana.